En la actualidad, presenciamos una época histórica en la evolución del fútbol, donde la figura del analista ha experimentado un crecimiento exponencial.
La profesionalización del fútbol ha abierto innumerables oportunidades para aquellos apasionados que desean adentrarse en el mundo del fútbol de una manera más profunda y, lo más importante, que puedan vivir de él.
¿Cómo ha revolucionado el análisis táctico el fútbol?
El inicio
Todo comenzó en la década de 1950 cuando Charles Reep se convirtió en el precursor del análisis táctico.
Fue el pionero porque fue el primero en recopilar información durante un partido con papel y bolígrafo.
A partir de entonces, y debido a las ventajas que esto traía para la labor de los entrenadores y jugadores, se creó "la necesidad" de tener partidos en video.
Al principio se asignaba a alguien la tarea de grabarlos, un precursor del analista táctico moderno.
Seguro que te suena a esa persona mayor o ese niño, incluso el entrenador de porteros o el papá de uno de los chicos grabando con la cámara a modo favor del entrenador o por voluntad propia.
Bueno, gracias a Dios, eso solo fue el incio.
Ya no es "el que graba"
La idea de que el analista debía ser más que un simple observador se hizo más clara.
Se empezó a reconocer que la labor de grabar y analizar no debía recaer en cualquiera, sino en un profesional, un entrenador que no necesariamente estuviera en el banquillo.
Alguien que entendiese el fútbol al menos lo suficiente como para darle apoyo real al entrenador.
Como digo, menos mal que la evolución del analista ha sido palpable; ya no es simplemente el encargado de grabar. Ahora esa responsabilidad suele caer en una persona con estudios, formado, con una afinidad con el entrenador o el cuerpo técnico y que supiera hacer algo productivo con ese vídeo.
Al menos, hacer algunos clips y separar por fases o distinguir acciones individuales.
Un profesional más
El analista táctico se ha convertido en una figura crucial, transformando directamente la dinámica del fútbol. En muchos equipos, desafortunadamente, el "analista" sigue siendo el segundo entrenador, otorgándole una importancia considerable a esta figura como alguien que comprende a fondo el fútbol.
Pero si esto ocurre así, casi siempre es por la falta de recursos económicos que imposibilite la contratación de un analista.
La capacidad de hacer mejorar al equipo en cualquier aspecto y fase del juego cuando hay especialistas en la materia que da su punto de vista, opinión y proponen soluciones al juego, es demasiado grande como para que los clubes no piensen en tener uno o varios en sus equipos.
De hecho, cuando hablo de analista, siempre me refiero a analista táctico con conocimiento en datos y al analista de datos con conocimiento en táctica.
Cómo ha transformado el fútbol
El analista táctico ha evolucionado y ha transformado directamente el fútbol.
Desde hace poco, prácticamente todos los equipos profesionales cuentan (o deberían contar) con un departamento de análisis. Este departamento no solo brinda apoyo al cuerpo técnico, sino que también se ha vuelto cada vez más multidisciplinario, involucrando aspectos físicos, tácticos y técnicos.
Aquí puedes conocer más sobre el tema
En la actualidad, es raro encontrar clubes que no integren datos o vídeo en su estructura o carezcan de personal especializado en esta área.
Notar esta transición desde el "amigo que grababa los partidos" hasta el profesional, que en realidad es un entrenador, con conocimientos tecnológicos y comprensión de datos, es motivo de alegría y de visión hacia el futuro inmediato.
Hemos pasado de utilizar lápiz y papel (nunca desechable) a adoptar la tecnología que domina nuestras vidas diarias.
Cómo será el futuro del analista de fútbol
Ahora poseemos la capacidad de conocer más que nunca debido a la cantidad de datos que se generan por segundo.
En el fútbol pasa igual.
Datos físicos, tácticos, económicos y biológicos proporcionan información valiosa para potenciar el rendimiento de un jugador y comprender mejor a rivales, equipos propios e incluso planificar estrategias que puedan llevar a un jugador a convertirse en la próxima venta multimillonaria para el club de ese jugador que quieren fichar por poca cantidad y vender por mucho.
Con el tiempo, se ha logrado un acceso cada vez mayor a herramientas, información, partidos y datos.
Este avance beneficia no solo a los profesionales del fútbol sino también a los aficionados, quienes son la columna vertebral de la industria. A los aficionados.
Y con lo que está sucediendo hoy en día con la IA, el Big Data, el aprendizaje automático o cualquier tecnología vanguardista, se abren más escenarios aún para continuar esa labor de analista a un nivel superior.
Conclusión
La evolución del analista de fútbol no solo ha transformado la forma en que se juega el deporte, sino que también ha democratizado el acceso a la información, brindando a entrenadores, jugadores y aficionados herramientas para comprender y disfrutar el juego de una manera más profunda y significativa.
El analista o entrenador que no esté en el barco de la tecnología y de las nuevas tendencias, está fuera del mercado.
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P.D: Es fundamental recordar que el analista no es solo un observador, sino un entrenador que debe aportar soluciones al cuerpo técnico. Su papel va más allá de recopilar datos; implica interpretarlos y utilizarlos estratégicamente para mejorar el rendimiento general del equipo.
